aislamiento acustico de ventanas

9 consejos para un buen aislamiento acústico de tus nuevas ventanas

En términos generales se ha asumido como normal la convivencia con unos altos niveles de ruido exterior: Coches, perros ladrando, ruido nocturno los fines de semana, etc.

Esto hace que el aislamiento acústico de ventanas se haya convertido en un importante aspecto cada vez más demandado.

Comúnmente la razón de peso por la que el usuario de una vivienda se decide a cambiar las ventanas es la de mejorar el aislamiento térmico de las mismas. Sin embargo no hay que desaprovechar la oportunidad de mejorar las prestaciones acústicas

En otras ocasiones es imprescindible la instalación de ventanas con un alto grado de aislamiento acústico por la proximidad a zonas de elevado ruido exterior, como zonas de mucho tráfico, o pubs y discotecas. Este tipo de situaciones perjudica seriamente la calidad del sueño y la capacidad de concentración, empeorando la calidad de vida de los usuarios de la vivienda. Incluso puede depreciarse el valor económico de la misma, por el reducido atractivo a la adquisición de una vivienda en estas condiciones.

A título orientativo el nivel máximo de aislamiento en una fachada (pared + ventana) no superará en más de 10dB el aislamiento acústico de la ventana. Habitualmente el espacio que ocupa la ventana es del 30-40% de la superficie de la fachada y en estos casos la mejora ronda entre 4-5dBA. Por esto es imprescindible volcar todos los esfuerzos en mejorar las prestaciones de las ventanas antes que en el cerramiento opaco o pared.

Ahora vamos a ver algunas de las principales características de las ventanas y criterios de ejecución para un buen diseño acústico, de manera que tanto usuarios como técnicos sepamos que  debemos exigirle a una ventana y a un instalador para lograr nuestro objetivo:

Características de las ventanas:

  1. Estanqueidad al aire: es necesario elegir una carpintería con buena clasificación, es decir las de las clases 3 y 4.
  2. Asimetría: Si se utiliza un doble acristalamiento, usar láminas de vidrio de diferente espesor, por ejemplo una de 4 y otra de 6 mm, en lugar de dos de 4mm o dos de 6mm.
  3. Vidrio: El espesor de una de las hojas debe ser al menos de 6mm. Si la necesidad de aislamiento es alta puede ser recomendable el uso de un vidrio laminado acústico (que no es igual que un vidrio laminado de seguridad).
  4. Cámara: para acristalamiento doble, si las necesidades de aislamiento son altas se puede introducir un gas noble.
  5. Sistema de apertura: por regla general es mejor una ventana abatible que una corredera.
  6. Tambor de persiana: Se recomienda siempre utilizar carpinterías con capialzado prefabricado, ya que los tradicionales probablemente tengan rendijas, que suponen pérdidas importantes.

Criterios de ejecución:

  1. Asegurar la hermeticidad existente entre la fachada y la ventana durante la instalación, cuidando el sellado entre la ventana y la pared de fachada. De poco sirve invertir en una buena ventana si la estanqueidad es deficiente, pudiendo no alcanzar los niveles necesarios de aislamiento acústico.
  2. Rellenar el tambor de la persiana con un material absorbente acústico.
  3. Si el ruido es muy elevado será necesario colocar una ventana doble, de manera que la principal se enrase en la cara interior de la fachada y la secundaria en la cara exterior. Para esta segunda ventana la estanqueidad al aire debe ser baja. Con una clase 1 o 2 sería suficiente.

Como ocurre en cualquier materia es conveniente recibir el asesoramiento de un técnico cualificado en la materia antes de acometer cualquier tipo de actuación. Nadie mejor que él para:

  • Estudiar los aspectos relacionados con el tipo y niveles de ruido de tu zona, ya que ningún aislamiento acústico es igual de eficaz para todos los tipos de ruido.
  • Análisis constructivo: por ejemplo si fuera necesaria una doble ventana, posibilidad de colocar un capialzado exterior, etc.
  • Escoger la ventana y marco que mejor se adapte a las características de ese ruido y el tamaño del hueco, en base a la documentación técnica facilitada por el fabricante o suministrador.
  • Redacción de un documento justificativo del Código Técnico de la Edificación, como garantía de la solución propuesta.
  • Controlar la correcta instalación de los mismos.

Todo esto nos permitirá asegurarnos que vamos a escoger la solución óptima y que la ejecución será la adecuada. De esta manera nos evitamos problemas en el futuro,  ganamos en tranquilidad y pagamos por una ventana que se adapta a nuestras necesidades.

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